El ladrillo, un símbolo nacional

Para nadie en España pasa desapercibido que el símbolo nacional es EL LADRILLO.
Ya le dedican artículos en los medios de comunicación y a este paso le dedicarán poemas y libros de texto para la ESO.

Esta España del pelotazo debería cambiar su escudo por otro más acorde con los nuevos tiempos.

En este páis, el ladrillo y el cemento son una religión de la que muchos empresarios, políticos y banqueros son fervorosos seguidores. Ladrillistas y cementistas practicantes que acuden cada día a su particular misa en la que se intercambian maletines, como dictan los cánones, para comulgar con los dictados de su constructor (que no creador).

El ladrillo sea contigo.